Nurit Martínez en El Universal
Las oportunidades en la educación superior “están creciendo más lentamente” y de continuar con dicha tendencia, es posible que México “no logre superar ese rezago”, advierte la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Al presentar el Panorama de la Educación 2012, el organismo advierte que hasta el año 2010 sólo 22% de la población, en el rango de edad entre los 25 y 34 años, tenía estudios universitarios, lo que provocó que nuestro país se situara en el grupo de naciones que acumulan “retraso” en ese nivel educativo.
México se ubicó apenas por arriba de Brasil, Turquía, Italia y Austria, en la medición de 35 naciones. En el extremo contrario está Corea con más de 65% de los jóvenes con ese nivel educativo, seguido de Japón y Canadá con casi 60%.
Pedro García de León, estadista de la División de Indicadores de la Educación de la OCDE, aseguró que las oportunidades en la educación superior crecen lentamente y “alcanzar el promedio es difícil” pues el del resto de los países también se mueve.
“No es una tarea imposible”, pues muchos países han logrado superar el promedio, por ejemplo China y Chile que en los últimos años cambiaron radicalmente, al aumentar la cantidad de jóvenes que lograron graduarse en el nivel universitario, refiere.
Durante la videoconferencia realizada desde la sede de la organización en París, previo a la liberación del informe, García de León insistió que en México la proporción de jóvenes que tiene educación superior es “relativamente baja”.
Explicó que esa condición hará que en “15 o 20 años el nivel de educación de la población adulta en su totalidad tendrá dificultades para superar el rezago que ya existe”.
Sugirió que nuestro país debe tener políticas específicas para avanzar a “pasos acelerados y no simplemente mantenerse en los niveles de promedio de los países de la OCDE”.
Agregó que entre menor es la educación de lo jóvenes en la población adulta, el potencial de avance en el nivel educativo se traduce en un rezago.
Esa condición tiene impacto en niveles de desarrollo futuro del país.
“Si el 100% de los jóvenes entre 25 y 34 años tuvieran la educación superior, quiere decir que a medida que pasen las generaciones, en 20 años, podemos suponer que la población adulta incrementará su nivel educativo”.
El panorama también se advierte en la educación media superior. En México se puede prever que sólo 4 de cada 10 niños que ingresaron al sistema educativo en el año 2010 podrán graduarse del bachillerato, esto es la menor tasa entre países de la OCDE.
La organización reconoció que en la última década en México se incrementó la cobertura en el nivel preescolar, que hace que México se coloque en el lugar número 4 de los 38 países.
Pero el reto en preescolar, al igual que en el bachillerato es la calidad debido a la concentración de alumnos por salón. En tanto que se alcanzó la universalización de la primaria, es este último caso debido a la disminución de la población entre 5 y 14 años de edad.