Sinaloa necesita de un consejo de vinculación que fomente una interacción adecuada entre los sectores empresarial, académico y gubernamental que ayude a desarrollar empresas innovadoras y a dar mayor crecimiento a la economía estatal, expresó el doctor en Ciencias Sociales Rosario Alonso Bajo, especialista en sistemas de innovación regional.
Explicó que el modelo de vinculación conocido como la triple hélice, basado en la generación de conocimiento e innovación a partir de poner en contacto a las empresas, el sector académico y el Gobierno, no ha dado resultados en Sinaloa debido a la distancia entre los tres actores principales. Expresó:
El modelo de la triple hélice no está funcionando en Sinaloa porque los conocimientos que se generan no son aplicados ni por las empresas ni por el Gobierno, porque el sector productivo muchas veces no sabe ni qué conocimientos se están generando en las universidades, aquí en México y Sinaloa no hay relación entre las empresas y las universidades
Bajo consideró que el desconocimiento y la desconfianza del sector empresarial respecto a los resultados de interactuar con el sector académico, son las causas del distanciamiento entre ambos sectores de la sociedad sinaloense. Menciona:
La vinculación no se ha dado porque los empresarios desconocen las bondades de un proceso de vinculación para su empresa, que sin duda alguna ayudaría a hacerlos más innovadores y a detonar el crecimiento en el estado, otra razón es que los empresarios desconfían de los productos que se generan en las instituciones de educación superior.
Apuntó que la interacción entre empresas, academia y Gobierno puede rendir resultados positivos en Sinaloa. Comenta:
Para que realmente funcione el modelo de la triple hélice se tiene que crear un consejo de vinculación donde estén representados la esfera empresarial, la gubernamental y la educativa y que ahí se defina claramente qué es lo que se requiere en Sinaloa en el corto, mediano y largo plazo y trabajar en ese mismo sentido.
Bajo destacó que en Sinaloa la vinculación entre el sector productivo y científico requiere de un análisis de sus áreas de oportunidad. Indicó:
Aquí lo que hace falta es detectar las necesidades, tanto empresariales como de Gobierno y sociales, y con base en eso ver qué proyectos son los que se van apoyar y que conocimientos se espera generar y el impacto que tendrá dentro del esquema de la sociedad sinaloense y su economía.