Ivonne Vargas Hernández en CNNExpansion
Encontrar a un profesional para desempeñar cierta actividad puede ser como buscar una aguja en ‘un pajar’.
Pero en México, éste no es el caso de las ingenierías. Cada año egresan más de 80,00 profesionales del área industrial y de computación, según cálculos de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES).
“Hay 90,000 ingenieros relacionados con Tecnologías de Información y Comunicación (TI). Sin embargo hay un hueco en el sector privado y en el gobierno para que esos profesionales cumplan con la especialización que se exige”, dice Alfredo Pacheco Vázquez, Director Ejecutivo México IT, programa de promoción de la iniciativa privada de TI operado por la Canieti (Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información).
El ejecutivo reconoce que en el país la oferta de estos profesionales es más alta que en Brasil y Estados Unidos, en este último el porcentaje de alumnos en carreras de ingeniería y tecnología ha disminuido en cinco años, indica la oficina de Estadísticas Laborales de ese país (Bureau Labor of Statistics).
En México la dificultad comienza cuando se trata de cubrir niveles de mayor experiencia. “Hay volumen. Por ejemplo, no hay problema para llenar posiciones en un call center, dice Pacheco Vázquez; pero, si se trata de conseguir a un ingeniero certificado en determinados módulos o programas, el número de candidatos se hace menor.
¿Qué se busca y dónde cotizarse mejor?
Mauricio Dávila Ramírez, director de capital humano de Neoris México, empresa de consultoría en TI y negocios, expresa que es todo un reto encontrar personas con certificación en ciertas tecnologías. Hay programas que son materia prima para el ingeniero, como el caso de un software financiero, sin embargo, es menos conocido un software “APO” que tiene varios niveles de aplicación para planificar redes de suministro y producción; ahí hay un área de oportunidad.
Si lo que quieres es diferenciarte de los demás, el truco está en comprobar en qué estás especializado y para ello la certificación es un recurso importante. La gente relacionada a TI que cuenta con esta herramienta gana entre 20% a 25% más en percepción salarial, según un sondeo realizado por México First, un programa coordinado por Canieti que brinda capacitación a los profesionales del sector.
Aún con esa cifra, lo común es que el profesional tome esta actualización cuando se los pide la empresa, no por cuenta propia, dice Rogelio Garza Garza, director general de Canieti. Agrega que lo vinculado a plataformas Java, SAP, multimedia, animación digital, video juegos y animaciones análogas destaca en el terreno de certificaciones.
El reto para los profesionales de las TI, como sucede en otras carreras, es no estacionarse en la zona de confort. En lo primero que te perjudica esa actitud es en la oportunidad de negociar un sueldo. “Si eres como el resto, ¿por qué se habría de pagar un extra?”, explica la psicóloga industria, Elsa Noriega.
“Ya no basta ser bueno en el software médico, por citar un caso, hay que saber más de dispositivos electrónicos; esto significa apostar por la ‘verticalización’, es decir, llegar a nichos de mercado donde casi nadie está especializado”, explica Rogelio Garza.
De acuerdo con el director general de Canieti, hay algunos sectores más activos en la demanda de profesionales especializados que cuenten con una certificación. Además de tecnología, figura la industria del cuidado de la salud, con todo lo relacionado a expediente electrónico, administración de medicamento, aplicaciones y dispositivos para control de pacientes; finanzas, especialmente en el sector bancario; automotriz y aeroespacial con los dispositivos y desarrollos controlados por computadora. A todo esto se suman multimedia, videojuegos y animación digital.
Actualmente, casi 17,000 personas han sido certificadas por Canieti, y aún falta mucho por hacer si se considera un universo de 90,000 profesionales orientados a TIC. De ahí que el vínculo con las universidades debe estrecharse, para que los profesionales reciban la actualización con más anticipación y estos profesionales sepan lo que busca el mercado, afirma Pacheco Vázquez.
Actualmente, algunas escuelas imparten asignaturas de arquitectura empresarial, “cloud computing” y certificaciones, pero hace apenas una década era raro encontrar escuelas que impartieran materias de SAP, ejemplifica Mauricio Dávila.
En salarios la mayoría de las veces la palabra clave es “sumar” quizá no en efectivo pero sí en las compensaciones que acompañan la percepción económica. Para trabajar en TI sucede algo similar, tener una certificación es un paso importante y a eso hay que agregar otras herramientas que no son técnicas, como dominar otro idioma y tener una gran capacidad de relacionarse, comenta el responsable de capital humano en Neoris.
“La empresa se fija en el candidato en dos sentidos. Sus habilidades como la empatía y entendimiento, y por otro lado sus conocimientos técnicos”, indica Dávila Ramírez.
Para tener éxito en conseguir una oportunidad de trabajo hay que ser muy proactivos desde que mandas el currículo, que debe ser práctico, contundente en habilidades y no tan descriptivo. En el mercado laboral, sin embargo, es común encontrar que muchas personas con experiencia envían su CV con faltas de ortografía, señala el directivo.
En un esfuerzo por acercar al egresado a lo que demanda la empresa, en Neoris se tiene un programa de capacitación que recibe entre 45 y 55 jóvenes al año, y arriba del 65% se queda a laborar con ellos, puntualiza Mauricio Dávila.