Con más de 6.000 vehículos de células de combustible vendidas a finales de 2017, hasta 10 fabricantes de automóviles compitiendo en este espacio por 2021 y un pronóstico de 40.000 vehículos vendidos por 2025, el sector de las células de combustible de hidrógeno está ganando tracción. Alimentado por la tecnología de membrana de intercambio de protones (PEM), la pila de combustible incluye una membrana impregnada con metales preciosos. Otras aplicaciones para las membranas incluyen electrolizadores, trenes y energía estacionaria.
El objetivo de este proyecto es explorar los métodos de reciclaje de las membranas (MEA) de forma segura con el fin de separar el contenido de metal precioso reutilizable de otros productos que pueden dañar el medio ambiente. En la actualidad, los metales preciosos sólo se pueden recuperar a través de un proceso de combustión y liberación de compuestos F1 peligrosos. Las celdas de combustible y electrolizadores se entienden como tecnologías verdes. Este proyecto tiene como objetivo proporcionar una solución de reciclaje verde que recupere productos más útiles que puedan alimentarse directamente de nuevo en el proceso de producción.
El aspirante exitoso tendría la oportunidad de explorar la cinética de lixiviación y deposición de algunos de los componentes no estudiados previamente, como el iridio. Esto implicará probablemente las técnicas y el equipo tal como discos rotatorios, electrodos del disco del anillo y microbalance electroquímico del cristal de cuarzo. El proyecto se fijará en el efecto de la temperatura en las tasas y la eliminación del componente Nafion antes de la lixiviación en la recuperación de metales. El equipo usará estos datos para diseñar un proceso/reactor que permita la validación del rendimiento.
Fecha cierre convocatoria beca 18 julio 2018
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